La decisión que comunicará Pedro Sánchez este lunes nadie la sabe. Si acaso, su círculo más cercano. Solo el presidente del Gobierno conoce en qué quedará la carta publicada el pasado miércoles, tras la que decidió parar para "reflexionar".
El sábado se celebró un comité federal del PSOE, en el que se sucedieron los mensajes de aliento a Sánchez, queriendo convencer al presidente de que recapacite y no dimita: "Pedro, quédate", imploró la vicepresidenta primera del Gobierno y vicesecretaria general del PSOE, María Jesús Montero. En la calle, se escuchaba: "No estás solo", "basta ya" gritaban en contra de la "campaña de acoso y derribo" en su contra que denunció el propio Sánchez en su carta a la ciudadanía.
Sánchez anunció por sorpresa que se retiraba unos días de la vida pública para decidir si continuaba o no en La Moncloa después de que un juez abriese diligencias ante una denuncia contra su mujer Begoña Gómez por tráfico de influencias y corrupción en los negocios.
El anuncio dejó en shock a su propio partido, que no estaba al tanto de los planes del presidente, pero en pocos días reaccionaron y decidieron mantener el comité federal que estaba convocado de antemano y convertirlo en un gran acto para mostrar total adhesión con su líder.
Ha sido una cita inusual, las intervenciones que habitualmente se realizan en privado, sin acceso de la prensa, han sido en abierto y con pantallas gigantes en la calle para que los militantes siguiesen las intervenciones de los líderes del partido en tiempo real.
Este domingo, se siguen produciendo reacciones en espera de saber qué decide Sánchez, al que el ministro de Transportes y Movilidad Sostenible, Óscar Puente, ha calificado como "el puto amo".
Óscar Puente ha cargado contra los partidos de derecha que, en sus palabras, realizan una "campaña feroz" contra Pedro Sánchez y ha apuntado que ve a Feijóo y "no puede evitar" recordar la época en el que el mandatario popular "hacía lo mismo con Emilio Pérez Touriño" en Galicia.
"Estamos viendo hoy lo que vivisteis en Galicia en aquel momento y también las prácticas que aquí desarrollaron para retener el poder", ha lamentado. La derecha, ha continuado, lo que "considera" es que el "poder le pertenece" y, por lo tanto, cuando "no lo tiene" es porque alguien le "ha quitado lo que es suyo".
De lo que nadie duda es que la decisión final de Sánchez será íntima, personal y la tomará únicamente junto a su mujer Begoña Gómez, toda vez que fue la denuncia contra ella y la posterior apertura de diligencias por parte del juez, lo que desencadenó el anuncio realizado en una carta dirigida a los ciudadanos.
"Necesito parar y reflexionar. Me urge responderme a la pregunta de si merece la pena, pese al fango en el que la derecha y la ultraderecha pretenden convertir la política. Si debo continuar al frente del Gobierno o renunciar a este alto honor", escribió Sánchez en un texto que pilló por sorpresa a todo el país, incluidos sus ministros.
Protestas para pedir la dimisión de Sánchez
Varias decenas de personas se congregaron en la madrileña calle de Ferraz para protestar y pedir la dimisión del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, apenas unas horas después de que miles de simpatizantes socialistas se reunieran en la misma calle para arropar a su líder y pedir que siga en el cargo después de que anunciara que estaba meditando renunciar.
Entre gritos de "Pedro Sánchez a prisión, amnistía corrupción" y "por esta izquierda, España va a la mierda", un grupo de manifestantes se han reunido en Ferraz con banderas españolas y mensajes contra el Ejecutivo.
Hazte Oír, que ha denunciado a la mujer del presidente ante la Fiscalía Europea, ha sido uno de los organizadores de la manifestación, y ha acudido al lugar con pequeños camiones que tenían en sus laterales imágenes de titulares de prensa con la noticia de la carta que Sánchez remitió el miércoles a la ciudadanía, con la que informaba que suspendía su agenda y estaba sopesando la idea de dimitir.
Unas horas antes, miles de personas llegadas desde distintos puntos de España, en una movilización de última hora, coreaban consignas a favor del presidente: "No estás solo", "basta ya" gritaban en contra de la "campaña de acoso y derribo" en su contra que denunció el propio Sánchez en su carta a la ciudadanía.
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