Un hombre de 83 años ha matado a su hijo, de 55 años, en la casa en la que vivían en Labiano, Aranguren, en Navarra. El octogenario había manifestado que quería irse de la vivienda al no soportar la mala convivencia y ha acabado cometiendo un parricidio.
Agentes de la Policía Foral han detenido a este hombre que, sobre las 8.15 horas, acabó con la vida de su hijo, hecho que él mismo contó a su vecina, que, de inmediato, avisó a SOS Navarra 112.
Según recoge Noticias de Navarra, ambos se habían peleado y el hijo había amenazado al padre durante la noche con un cuchillo para solicitarle dinero. Ante esta situación, el padre cogió una escopeta de caza y le disparó tres veces.
La víctima, separado y con dos hijas, solía llevar a personas a su casa, algo que irritaba al padre y que generaba discusiones frecuentes entre ellos. La Policía Foral se ha hecho cargo de las investigaciones.
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