"Ha merecido la pena ir a ver al Povedita este": Jerez te quiere, Miguel

El artista catalán hace escala en Jerez para reencontrarse con el público de la tierra que le "acelera el corazón". María Jiménez fue protagonista especial en un abarrotada Plaza de Toros

Miguel Poveda, con el reflejo de La Paquera en el escenario, anoche en la Plaza de Toros de Jerez.
Miguel Poveda, con el reflejo de La Paquera en el escenario, anoche en la Plaza de Toros de Jerez. MANU GARCÍA

Miguel Poveda en Concierto - Plaza de Toros de Jerez - Viernes, 8 de septiembre de 2023

Cante: Miguel Poveda - Piano: Joan Albert Amargós - Guirarra: Jesús Guerrero - Percusión: Paquito González - Palmas y Coros: El Londro, Carlos Grilo y Los Makarines - Bajo: José Manuel Posada 'Popo' - Trombón: Roberto Pacheco - Producción: Emell Eventos - Aforo: Lleno

La buena sombra de Miguel Poveda hace escala en Jerez para reencontrarse con un público que le quiere y adora, tanto como la pasión que el artista catalán le profesa a la tierra borborea. Con espectadores suficientes como para llenar el Teatro Villamarta varios días, el paréntesis realizado dentro de la gira Diverso le sirvió al artista catalán para tomar de nuevo el pulso a esa fórmula de éxito en la que marida copla y flamenco.

Así quedó patente, vestido de lentejuelas y azabache, en la Plaza de Toros, donde un público enfervorizado esperaba con ansias que comenzara un espectáculo al que dio inicio afrontando el repertorio clásico de Antonio Gallardo con La senda del viento y el himno que Manolo Sanlúcar compusiera a su amada Andalucía, donde la carne viva hace aflorar la historia y la voz clama por su tierra y madre.

MIGUEL POVEDA CONCIERTO JEREZ 13
Llenazo para el concierto de Poveda en Jerez.   MANU GARCÍA

Pero si algo tiene Poveda es que es listo como los ratones de González-Byass. Y por bulerías acto seguido puso boca abajo el coso de la calle Circo. Ese leco que suena a lo lejos a Zambos y Sorderas, con la Paquera en el recuerdo, y Jesús Guerrero enorme —como siempre—, ofreciendo en bandeja un soniquetazo sobre el que embarcaba el cante de la Plazuela o la borrachera eterna de Morao, sacaba los móviles de los bolsillos del público ‘despacito y a compás’ para empezar a grabar. La bulería corta. La de aquí. La de la Porvera p’arriba. Esa que se dicen en Santiago. La de la fuente que da beber al Prendimiento y al Bo en la memoria. Y también la de allí. Esta otra bulería que empoderan La Paquera y Lola.

Enorme Miguel, que además no se olvidó ni de su hermano Fernando. Terremoto para las señas. Ni tampoco del otro Fernando. El hijo de la Morena. Sólo han pasado quince minutos y ya nos podemos ir para casa. Así. Sin más.

MIGUEL POVEDA CONCIERTO JEREZ 3
Un momento del cante de Poveda.   MANU GARCÍA
MIGUEL POVEDA CONCIERTO JEREZ 5
Poveda, en el escenario.  MANU GARCÍA

“Jerez te quiere Miguel”, se escucha desde los tendidos. “Mi corazón se acelera en esta bendita tierra que tanto quiero y tanto admiro”, responde desde el escenario, añadiendo que “es mucha responsabilidad estar aquí hoy y yo quiero asumir ese reto de que, cuando os vayáis para casa, digáis que ha merecido la pena venir a ver al Povedita este”.

Lorca, santo y seña

Del baúl de los recuerdos —y el tatuaje de su brazo— emanan los versos de la carta a Regino Sainz del Poeta de Granada. Esa en la que hay mil Federicos en el desván del tiempo. Lorca es un referente. Santo, seña y guía para su genoma vital. Padre, de Serrat, como alegato al mundo en el que vivimos recogía el testigo, junto con la reivindicación de la identidad para que “la gente sienta como lo que quiera sentir”, al igual que Simón, ese gran varón nació en el verano del 56 y fue el orgullo de Don Andrés, pero que murió sola porque el palo que nace doblado, como dice la letra, jamás nunca su tronco endereza.

Mi Amigo, de Rafael de León, fue el látigo de hiel de nuestro castigo más allá de la rítmica de Bambino, mientras la Aurora arrancaba por fandangos con el Marchena más visceral. Oriente y occidente. Alfa y omega. Genial de nuevo. De la metáfora que esquiva la censura, al cantaor que daba otro color a lo jondo.

MIGUEL POVEDA CONCIERTO JEREZ 11
Poveda lo dejó todo en el coso jerezano.  MANU GARCÍA

Pero como el flamenco es su felicidad “gracias a los discos de mi madre, que decía cuando salía Chiquetete lo de eso es un hombre, y que Juanito Villar que no tiene dos ojos sino dos piscinas y, sobre todo, María Jiménez - que todavía sigue viva en nuestros corazones, como Lola Flores” todos juntos celebramos la vida, alzamos nuestra copa y con una ovación se reconocía la aportación como icono cultural del 'ciclón de Triana’ que nos ha dejado hace escasas fechas o, más bien, horas aún.

Qué felicidad la mía, de la más liberal de las sevillanas, y el Otro camino de Los Chichos, dónde unos ganan y otros pierden, dejaban constancia de que no tenía la menor intención de salir por otra puerta de la Plaza de Toros que no fuera la grande. Esa que da a la calle Circo. Y que sabe de arte y artistas como pocas. Porque, además, negar que Miguel Poveda es cantaor flamenco es mentir a realidad. 

Y de brillo y plata arrancaba la parte jonda, después de que Jesús Guerrero se acordara de Moraíto o Tomatito, además de pentagramas de su cosecha, a compás de doce tiempos a un ritmo endiablado.

MIGUEL POVEDA CONCIERTO JEREZ 12
Recuerdo a Lorca en el concierto de Miguel Poveda.   MANU GARCÍA

El universo de las tonás abre plaza. Las trilleras, el recuerdo a la locura del Niño Gloria por martinetes y la debla que grita la grandeza de la libertad dejan paso al dolor presente de la seguiriya agujetera con el ‘carrito de los muertos’ y la soleá apolá, la alfarera y la zapatera de Triana, esa soleá, por otro lado, que se remata con la verde oliva que cae por burlerías o se pregunta qué planeta reinaba el día del nacimiento de Imperio Argentina en Morena Clara.

La malagueña del Mellizo pide paso como obertura de unos abandolaos exigentes en compás y ritmo. In-ear fuera. La tecnología y la jondura nunca terminan de llevarse bien. Rondeñas y verdiales le aguantan el tipo al soniquete que marcan El Londro, Carlos Grilo y los Makarines, con Paquito González ejerciendo de metrónomo.

MIGUEL POVEDA CONCIERTO JEREZ 9
Poveda, en Jerez.   MANU GARCÍA

La soleá por bulerías y los tangos, principalmente de la artesanía Triana, arrebato bailaor incluido, vaticinan que todo va llegando a su fin. Mas de hora y media sin desaparecer del escenario obligan un momento de respiro antes de afrontar el final. “Tranquila señora, que la de Tres Puñales la voy a hacer”, le dice a quién lleva toda la noche en busca de la coplería. “Le voy a dar pastillas Juanola, señora, no se vaya a quedar afónica”, abunda Poveda, después de presentar al staff y antes de meterle mano a las cantiñas con las que puso fin a la parte oficial, consciente de que, mandilín mandilón, los bises eran de obligado cumplimiento.

Y estos llegaron. Cómo no. Primero con la parte ‘rapera’ de Diverso a compás de bulerías y después con La Leyenda del Tiempo que compusiera Lorca, pero que adaptaron Enrique Morente, Kiko Veneno y Ricardo Pachón a José Monje Cruz Camarón de la Isla; y, por último, regalo de chaqueta incluido a Joaquín Grilo para que le bailara, una colección de coplerías donde Alfileres de Colores y Tres Puñales pusieron el colofón a una noche redonda, en la que Miguel Poveda le devolvía a Jerez en forma de canto y cante el cariño que le profesa a la ciudad que pide a gritos, como la Libertad del Lebrijano, salir de un ostracismo cultural que sigue sin mostrar la luz al final del túnel. Una luz que, por otra parte, ni está ni se le espera.

Sobre el autor:

David Montes

David Montes

Comunicador, flamencólogo.

...saber más sobre el autor

Archivado en:

Si has llegado hasta aquí y te gusta nuestro trabajo, apoya lavozdelsur.es, periodismo libre, independiente y en andaluz.

Comentarios (2)

Teresag Hace 8 meses
El concierto de Poveda a sido espectacular, le he ido a ver varias veces pero tengo que decir que en este se vacío por completo lo dio todo y más solo darle las gracias y decir que mereció la pena cada euro que me costo la entrada
Lola Hace 8 meses
Sigo a Poveda y lo e visto en varios conciertos, no me gustó que en Jerez no cantara por alegrías de Cadiz, con lo bien que lo hace , salí un poco despcionada
Lo más leído