Ninguno de los cuatro sacerdotes que siguen vivos están en España, no tienen ministerio público y siguen sus respectivos planes de seguridad en los lugares donde residen, según informa la congregación
Los casos vieron la luz cuando una de ellas, con 13 años, contó a sus padres que el religioso abusó de ella tras pedirle que le acompañara a su despacho por chucherías
Tuvo a su cargo a 47 menores a los que embaucaba para luego pedirles fotos de contenido sexual, generar conversaciones íntimas o enviarles contenido pornográfico explícito